autopsia...

la navaja se húnde como pies en arenas movedizas, suaves, se la tragan y lentamente va partiendo el tórax en donde hay líquidos azules, las costillas se abren como una jaula y dejan salir volando plumas tornasol ke rápidamente llenan el rostro del forense de motas ke le impiden ver bien, se limpia, prosigue con el procedimiento meticuloso, y se siente intrigado al ver ke al fondo de esas plumas hay cofrecitos de bronce, no uno, ni dos, muchos cofres de colores, en los cuales hay un brillo ke lo ciegan pero es más la curiosidad ke la incomodidad, y extrae cada uno de los cofres sobre la mesa metálica donde yace el cuerpo inherte de ella...saca un total de 24 cofres, los limpia cuidadosamente pues parece ke en su interior hay cosas valiosas y con el mismo bisturí con el ke partía la piel de la occisa, abre cada uno de los cerrojos diminutos ke sellan sigilosamente cada una de esas cajitas metálicas, las cuales en su interior, poseen cosas totalmente incomprensibles, números, imágenes, páginas dobladas de libros, fotos, facturas, un mapa, un anillo de plata, música, arena, un atardecer, dibujos, risas, una pluma de un colibrí, el colmillo de un elefante llamado salomón, un cubo de azúcar ke rodó por el suelo, y un sin fin de cosas ke el forense no logró asimilar ni interpretar....cerró cada una de los cofres, los volvió a colocar en el interior del cuerpo de ella...lo selló y volvió a ver el rostro sin vida, pero ke tenía una leve sonrisa dibujada.

y anotó: causa de la muerte: la vida.
fecha de la muerte: la indicada.

observaciones: fué feliz.