miércoles, 13 de agosto de 2014

tsunami.

"es un evento complejo que involucra un grupo de olas de gran energía y de tamaño variable que se producen cuando algún fenómeno extraordinario desplaza verticalmente una gran masa de agua" Ver la ola que va creciendo 5, 10, hasta veinte metros y no saber que hacer, sentir ganas de correr, de volar, de huir, o sencillamente de quedarse inmóvil y que el mar decida que hacer con uno, si te arrastra o te arrulla, dejarse fluir y no pensar en que va pasar, no llegar a tener nisiquiera insitinto de sobrevivencia por un segundo porque no hay tiempo, porque la avalancha de agua salada viene encima y no hay lugar donde esconderse ni pies que tengan tanta velocidad como para resguardarse y se decide nada más confiar en que todo siempre es para bien, y que lo que el mar trae el mismo mar se lo lleva cuando no alimenta ni ayuda a crecer y así fué, extraordinariamente el mar, nuestro amigo de tantas risas y tantas noches, el que nos vio juntos desde el primer día, nos volvió a juntar inesperadamente, como escrito por algún guionista creativo que no se aburre de la misma película, tu cara, la mía, totalmente indescriptibles como la sensación de vernos nuevamente de frente después de tantos años y tantas lluvias...la familiaridad y la naturalidad de todo más incomprensible aun y las reacciones al tsunami que se nos vino encima fueron las de siempre, los mismos viejos conocidos, las mismas risas con más lunas vividas y más tinta en nuestra piel, pero con la sensación absoluta de que hay cosas que ni el tiempo ni la vida cambian y el mar que todo lo sabe y todo lo ve, nos arrastró con sus olas para que los abrazos no quedaran nada más en sueños y las palabras no dichas se dijeran de frente como debía de ser, y así volvernos más livianos para continuar nuestros caminos y poder seguir quemando nuestros pies sobre su arena de sal.